Vuelvo de Ein el Helwe contento, muy contento. Por fin, después de un domingo sangriento y de un lunes de funeral (ver entradas anteriores de este Cuaderno de Viaje) parece que las cosas comienzan a transcurrir conforme a la agenda que teníamos planeada. Y, por fin, he conocido a uno de los chavales a los que el proyecto de Cives Mundi imparte Formación Profesional. Antes de eso, una entrevista con el jefe de Hamás en el campo de refugiados, Abo Ahmad Fadel.
Omar Khalaf tiene 19 años y estudia electricidad. Antes había trabajado de soldador. En el informe que teníamos sobre él se contaba que era muy entusiasta: había preguntado si podía estudiar dos cosas a la vez. Quizás tuviera también una salida como actor porque el chava, además de ser guapo, se enfrenta a las cámaras con una naturalidad pasmosa. En la grabación nos acompaña todo un séquito de nuestra contraparte aquí, la ONG Nabaa.
La idea es filmar un día normal en la vida de los chavales del proyecto, y esta primera experiencia nos sale redonda. Carlos Arciniega, mi realizador, toma unas imágenes estupendas. Omar vive en un barrio considerado sensible por la presencia de islamistas radicales. Su casa tiene un salón, una habitación y el baño. No es muy grande. Allí vive él con su madre, la hermana de ésta y su sobrino. No conocemos a la tía de Omar, pero sí a su madre, que es encantadora. Omar llega a casa, saluda, pregunta qué hay para comer (bueno más bien el orden de las preguntas es al revés), se lava mano,s brazos y pies, reza, y su madre le saca una bandejita con la comida, arroz cocido con patatas como plato único, que coloca sobre una bandeja. Luego, café, al que estamos todos invitados. Mientras hace todo esto hablamos con él. Hasta telefonea a su novia, de la que se despide llamándola cariñosamente vaca. Pero eso ya lo tendréis que ver en el documental que haremos a nuestra vuelta.
Antes habíamos estado entrevistando al jefe de Hamás en Ein El Helwe y en la zona Sur del Líbano. Abo Ahmad Fadel nació en 1958 en el campo de refugiados. Viste con chaqueta y pantalón, sin corbata y tiene una barba corta bien cuidada. Elogia y agradece la cooperación internacional (salvo la americana) y cree que sería interesante tener más proyectos relacionados con el deporte. Natalia Sancha, delegada de Cives aquí y estupendísima anfitriona, le interroga sobre diversas cuestiones de la endiablada política de esta zona. El encuentro acaba a la hora del rezo. Mañana entrevistaremos al jefe de Al Fatah, la personalidad política más relevante de Ein El Helwe, y estaremos con Sara Abo, beneficiaria del proyecto.
